Un nuevo hecho de violencia conmociona a la noche porteña. Durante la madrugada de este miércoles, un trabajador de seguridad de 56 años murió tras ser brutalmente agredido en el boliche Makena, ubicado en Fitz Roy al 1500, en el corazón del barrio de Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Según testigos del lugar, el episodio se originó cuando un cliente, que habría sido retirado del local minutos antes por comportamiento violento, regresó y golpeó salvajemente al patovica, quien habría intentado contener la situación. A pesar de que fuentes cercanas al boliche intentaron minimizar el hecho, asegurando que el empleado se descompensó tras un paro cardiorrespiratorio, testigos sostienen que fue producto directo de la golpiza.
El hombre, cuya identidad aún no fue oficialmente confirmada, habría estado en situación de precarización laboral, según trascendió de allegados. Hasta el momento, ninguna entidad sindical del rubro ha emitido un comunicado al respecto, lo que generó fuertes críticas en redes sociales por el silencio gremial ante una posible situación de vulnerabilidad laboral.
Desde el establecimiento Makena, la versión oficial indica que tras el altercado, el trabajador se encontraba bien, contento y sonriendo con sus compañeros, hasta que se descompensó repentinamente. Sin embargo, los testimonios recogidos por los presentes contradicen esa versión y apuntan a una agresión física directa que habría provocado su muerte.
La justicia ya tomó intervención para esclarecer los hechos. Se espera que las cámaras de seguridad del lugar, así como los testimonios de otros empleados y asistentes, permitan determinar responsabilidades. Mientras tanto, el caso reaviva el debate sobre las condiciones laborales en la seguridad nocturna y la violencia recurrente en locales bailables de la Ciudad de Buenos Aires.
Bueno que esperamos despues dicen que en la vigilancia no hacemos un carajo paro indeterminado,este hdp de Garcia paga miseria y a nosotros nos matan por monedas