La ciudad de La Plata anunció la incorporación de 150 Vigiladores municipales como parte de una tendencia en aumento en diversas localidades del país: la adopción de trabajadores de Seguridad Privada para tareas específicas. Esta medida tiene como objetivo liberar a efectivos policiales para que puedan concentrarse en la lucha contra delitos mayores, mientras los Vigiladores se encargan de labores preventivas.
El proyecto, que se desarrollará en una etapa piloto durante 12 meses, busca cubrir edificios y parques públicos dependientes de la Municipalidad. Los Vigiladores tendrán la tarea de realizar actividades de prevención contra robo, hurto, incendios, siniestros y destrucción intencional, así como la protección del público y del personal municipal.
Esta tendencia, adoptada por varios municipios, está generando un impacto significativo en la actividad de Seguridad Privada, ampliando rápidamente el número de trabajadores en el sector y generando nuevas oportunidades laborales. En el caso de La Plata, el programa tiene como objetivo optimizar los recursos policiales disponibles, asignándolos a tareas que requieren portación de armas de fuego y combate directo contra el crimen.
La iniciativa es vista como un paso hacia la profesionalización de los servicios de Seguridad Privada en los municipios, al tiempo que se contribuye a mejorar la eficiencia de las fuerzas de seguridad públicas. Este modelo, en constante expansión, podría marcar un cambio significativo en la manera en que se gestiona la seguridad en ámbitos municipales.
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