Vigiladores de la empresa de seguridad Comahue han denunciado una alarmante situación de maltrato laboral y despidos masivos que ha generado un clima de temor e incertidumbre entre los trabajadores. Según los empleados afectados, la empresa ha implementado una política de despidos injustificados, lo que ha mantenido a los Vigiladores en constante estado de pánico, temiendo por sus puestos de trabajo.
«Juegan con el miedo para que hagamos lo que ellos quieren,» afirmó un trabajador que prefirió mantener su anonimato. Además, mencionó que cualquier tipo de reclamo es sistemáticamente silenciado, ya que la empresa busca empleados sumisos que no cuestionen las condiciones laborales impuestas. Esta situación, según los denunciantes, no se limita a un solo lugar, sino que se extiende a todos los objetivos que Comahue tiene en la provincia de Buenos Aires, así como en otras provincias como Córdoba.
En particular, se señaló que en el aeropuerto de Córdoba, el jefe de servicio mantiene a los Vigiladores bajo constantes amenazas, impidiendo que se realicen reclamos legítimos relacionados con salarios adeudados. Esta situación ha dejado a los empleados sin margen de maniobra para hacer valer sus derechos, generando un clima laboral opresivo.
Los Vigiladores, cansados de esta situación, han comenzado a organizarse y formar una comisión de trabajadores con el objetivo de visibilizar estos problemas y conseguir respaldo. «Estamos buscando que más compañeros se animen a reclamar y que podamos trabajar en armonía, con nuestros derechos garantizados,» declaró uno de los organizadores de la comisión.
Los trabajadores esperan que sus denuncias generen la atención necesaria para que las autoridades laborales intervengan y se ponga fin a estas prácticas que atentan contra la dignidad y los derechos de los empleados. La situación es especialmente grave, ya que afecta no solo a la estabilidad laboral, sino también a la salud mental de los Vigiladores, que se encuentran sometidos a un régimen de control que roza lo abusivo.
Se espera que con la organización de más trabajadores y el apoyo de comisiones externas, los Vigiladores puedan recuperar un espacio de trabajo digno y en condiciones justas.
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