Una escena caótica se desarrolló en el supermercado VEA, ubicado en la calle 13, entre las intersecciones de 71 y 72 de la ciudad de La Plata, cuando un cliente intentó robar un vino y termino agrediendo al Vigilador que lo detuvo.
En un giro de los acontecimientos, un Vigilador confrontó al cliente, tratando de hacer cumplir la ley. Sin embargo, el ladrón reaccionó violentamente, golpeando al trabajador en el rostro. Este acto de agresión añadió un nivel de intensidad al incidente, obligando a los empleados a solicitar la asistencia de la policía.
Con la llegada de la Policía, el agresor fue finalmente detenido y enfrentará las consecuencias legales de sus acciones. Este incidente subraya la importancia de la seguridad y la vigilancia en los espacios comerciales, así como la necesidad de mantener la integridad y el cumplimiento de la ley en la comunidad.
El supermercado y su personal han sido elogiados por su respuesta rápida y eficaz, lo que permitió la detención del delincuente y la garantía de que se haga justicia. La historia sirve como un recordatorio del gran desempeño que cumplen los Vigiladores, afrontando riesgos en su día a día, que para mucho pasa desperdiciado.
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